martes, 18 de julio de 2023

 

TILLANDSIA

 



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Son una planta de rabiosa actualidad por su exotismo y singular belleza. Más allá de esta presencia única, hay un argumento más para plantearse tenerla: es una planta para todos los públicos. O, dicho de otra manera, los cuidados de tillandsia son tan sencillos que incluso alguien poco experimentado en plantas puede disfrutar de ella. Algo curioso de descubrir, ya que las plantas aéreas tienen fama de ser una planta delicada.

Ideales para cualquier decoración, la tillandsia se ha convertido en un imprescindible en la decoración de terrazas. Una manera sencilla y espectacular de poner una nota exótica en estos espacios, con una baja demanda de cuidados. Pero no solo podemos tenerla fuera de casa. También es una planta ideal para interior.

Familia de las bromelias, conocer los cuidados de plantas aéreas nos hace pensar irremediablemente en las orquídeas. Y es una asociación de ideas perfectamente lógica. Tanto unas como otras son plantas epífitas, que no necesitan sustrato para vivir, pero sí un clima húmedo. Algo también lógico, ya que la tillandsia es una planta originaria de bosques de climas tropicales. Un aspecto que marca, irremediablemente, los cuidados de plantas aéreas en lo que respecta a temperatura.

 

CUIDADOS FUNDAMENTALES

1. Luminosidad, uno de los cuidados de las plantas aéreas vitales

Es una planta tropical, ¡con eso hemos dicho casi todo! Y decimos casi porque, a pesar de que entre los cuidados de plantas aéreas la luz es imprescindible, hemos de ser cuidadosos. La tillandsia no puede recibir luz solar directa, ya que puede quemar sus hojas. Una precaución a tener fundamentalmente en los meses de verano.

Si la tenemos en interior, tendremos que situarla en un espacio muy luminoso.

2. Ubicación, apta para interior y exterior

Un aspecto de los cuidados de plantas aéreas íntimamente ligado a la temperatura.

A pesar de que es una planta que podemos tener tanto en interior como en exterior, hay que contemplar algunas salvedades. Sí podremos tenerla fuera todo el año si vivimos en un clima templado y húmedo. De ser así, la tillandsia crecerá con vigor a pesar de una de sus características: es una planta de crecimiento súper lento.

Si decidimos cultivarla en interior, es fundamental que esté en un espacio bien ventilado y alejada tanto de ventanas como de fuentes de calor, como puede ser un radiador.

3. Grado de humedad, el otro imprescindible en los cuidados de plantas aéreas

Como buena planta epífita, la tillandsia se nutre de la atmósfera que la rodea. Algo que nos obliga a procurarle un buen grado de humedad ambiental. Si vivimos en un clima seco o la tenemos dentro de casa, tendremos que ser rigurosos con este aspecto. Pero no solo en verano: también en la temporada de calefacción.

Dado que las plantas aéreas demandan una alta humedad ambiental, tendremos que dársela. Para ello, lo ideal es una pulverización diaria en los meses de calor; y una cada dos o tres días en los de invierno. Tampoco está de más, sobre todo en verano, sumergirla en agua. Pero ojo: no podemos hacerlo a la ligera. Tras este baño, lo idóneo es que no haya acumulación de agua sobre las hojas. Puede llegar a pudrirla.

De estar expuesta al agua más limpia que existe, el agua de lluvia, tendremos que sacudir ligeramente el exceso de la superficie de la planta.

La aplicación rigurosa de un abono específico es fundamental en los cuidados de las plantas aéreas. Descubre las características de este fertilizante

Y, a pesar de que esta agua nutrirá la planta, tampoco está de más que la ayudemos un poquito. Nos referimos a aplicar con cierta regularidad, a partir de la primavera, un abono foliar para tillandsias. Es importante que sea específico para ellas y con esta forma de aplicación. Por un lado, porque está pensado para nutrir las hojas de plantas que no viven en un sustrato. Por otro, porque si no las jugamos a utilizar otro tipo de fertilizantes podemos quemar la planta.

4. Heladas y frío, dos de sus principales enemigos

Cuando hablamos de enemigos de las plantas, tendemos a pensar siempre en eliminar las plagas. Sin embargo, esta preocupación podemos descartarla en lo que respecta a la tillandsia. Es tal su resistencia que, si seguimos al pie de la letra los cuidados de plantas aéreas, podemos olvidarnos de ellas. Una planta fuerte y bien cuidada presentará siempre más resistencia a cualquier ataque.

Sin embargo, hay otros dos enemigos mucho más silenciosos que las plagas. Nos referimos al frío y las heladas. Dos máximas del invierno que conviene evitar si queremos que nuestra planta sobreviva. Como buena planta tropical, la tillandsia es súper sensible al frío. Por eso, no podemos someterla a temperaturas menores a los 10 grados.

Si la tenemos en exterior, lo ideal es que en invierno pase más tiempo dentro de casa. Podemos o bien meterla dentro cuando comience a atardecer; o, si vivimos en un clima especialmente frío, buscarle un lugar para que pase el invierno con nosotros.

En lo que respecta al calor, tolera temperaturas de hasta 30 grados. Si el termómetro subiera más, tendríamos que vigilar especialmente el tema de la humedad.

5. La multiplicación de la tillandsia, una tarea para hacer sin prisa tras la floración

Y sí, floración. Un aspecto poco conocido de la tillandsia, que no es precisamente menor. Y es que de ser rigurosos con los cuidados de plantas aéreas, podremos verla florecer. Un espectáculo acorde a lo singular de su morfología. Decimos esto porque las flores de esta planta son especialmente hermosas. Con una distribución muy similar a la de la bromelia, emergen en tonos violetas y fucsias sobre el verde de la tillandsia en verano.

Un espectáculo que solo nos regalará nuestra planta si está debidamente cuidada. 

Pero no solo eso. Es más que habitual que, tras la floración, nuestras plantas aéreas comiencen a crear hijuelos. Pequeñas nuevas plantas que crecen sobre la madre, y que darán lugar a un ejemplar individual. De tenerlos nuestra planta, tendremos que tomárnoslo con calma. Lo ideal es dejarlos crecer el mayor tiempo posible para asegurarnos que, una vez separado de la planta madre, prospere sin problemas.

El momento ideal para llevar a cabo esta labor es la primavera. Y, para que no dañe ni a la planta original ni a la madre, nos obliga a hacerlo separando cuidadosamente las ramas jóvenes de la planta antigua.


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martes, 21 de marzo de 2023

El papel de los océanos en el cambio climático

 

cambio-climático

 

El papel de los océanos en el cambio climático

Por Francisco R. Villatoro, el 23 agosto, 2014. Categoría(s): 

Dibujo20140822 Warming takes a pause - after a rapid rise global mean temperatures have stabilized - science mag

La temperatura media del aire superficial en la Tierra ha estado creciendo desde 1975 hasta el 2000 y desde entonces se ha estabilizado. ¿Por qué? ¿Dónde está el calor generado por el cambio climático durante los últimos tres lustros? Dos estudios recientes apuntan a que se encuentra almacenado en las aguas profundas del océano Atlántico, unos 30 zettajulios (sextillones de julios) desde 1999. Aún no hay consenso entre los expertos; otros estudios sugieren que la dinámica del océano Pacífico también es importante. En cualquier caso, parece que todos coinciden en que los océanos son los responsables de la situación actual. ¿Hasta cuándo seguirán los océanos suavizando los efectos del cambio climático? Nadie lo sabe.

Nos lo cuenta Eli Kintisch, «Is Atlantic holding Earth’s missing heat?,» Science 345: 860-861, 22 Aug 2014. A favor del Atlántico tenemos a Xianyao Chen, Ka-Kit Tung, «Varying planetary heat sink led to global-warming slowdown and acceleration,» Science 345: 897-903, 22 Aug 2014, y Shayne McGregor et al., «Recent Walker circulation strengthening and Pacific cooling amplified by Atlantic warming,» Nature Climate Change, AOP 03 Aug 2014. A favor del Pacífico a Kevin E. Trenberth et al., «Seasonal aspects of the recent pause in surface warming,» Nature Climate Change, AOP 17 Aug 2014. [PS 25 Ago 2014] He cambiado el titular a su versión original (previa a la publicación de esta entrada). La causa es que comparto la opinión de César Tomé: «El titular es antropocéntrico y cortoplacista: parece que los únicos efectos son los que tengan que ver con el medio en el que vive el hombre. El hecho de que la energía se acumule en los océanos supone cambios en los ecosistemas y, posiblemente, en las corrientes, con efectos graves sobre la química y la vida marinas y el clima terráqueo a medio y largo plazo. Por tanto, el que la temperatura del aire no aumente tan rápidamente es sólo una ralentización de una de las variables, pero el proceso del cambio climático, y sus efectos, siguen.» La expresa en «Hitos en la red #31,» Naukas, 24 Ago 2014. Gracias, César. 



El análisis del oceanógrafo Xianyao Chen, Universidad Oceanográfica de Qingdao, China, y del físico atmosférico Ka-Kit Tung, Universidad de Washington, Seattle, EEUU, se basa en decenas de millones de medidas de la temperatura y de la salinidad de todos los océanos de la Tierra a 24 profundidades diferentes entre la superficie y los 1.500 metros, tomadas entre 1970 y 2012. Su resultado es que el Atlántico ha estado absorbiendo calor durante los últimos tres lustros. [Xianyao Chen, Ka-Kit Tung, «Varying planetary heat sink led to global-warming slowdown and acceleration,» Science 345: 897-903, 22 Aug 2014]


Según Chen y Tung el papel del océano Pacífico ha sido diferente; en este océano el calor se ha redistribuido desde el este (longitudes entre 220 y 280, la parte más próxima a América) hasta el oeste (longitudes entre 120 y 200, la parte más próxima a Asia). Sus aguas también presentan cierto incremento de temperatura, pero insuficiente para explicar el incremento de calor «perdido» en la atmósfera terrestre a escala global.

En el océano Atlántico el calor se ha almacenado sobre todo en latitudes altas (entre 20 y 60), por ello Chen y Tung sugieren que la clave del proceso es la corriente de la «cinta transportadora» que mueve el agua salada tropical hacia el Atlántico Norte, donde se hunde. Chen Tung sugieren que el ciclo natural de la cinta transportadora se ha acelerado en la década de los 1990 y se redujo alrededor de 2006. Por ello se ha acumulado calor en las aguas profundas del océano Atlántico.

¿Qué papel juega el océano Pacífico si la hipótesis de Chen y Tung es correcta? McGregor et al. publican en Nature Climate Change los resultados de la acumulación de calor en el océano Atlántico en sus modelos climáticos globales. El aire caliente en la superficie del Atlántico se eleva en la atmósfera y se mueve en dirección hacia el Pacífico donde cae en su parte oriental. Gracias a los vientos alisios en el Pacífico dicho calor se redistribuye hacia la parte occidental. Este fenómeno enfría la atmósfera a escala global entre 0,1 ° y 0,2 ° C. [Shayne McGregor et al., «Recent Walker circulation strengthening and Pacific cooling amplified by Atlantic warming,» Nature Climate Change, AOP 03 Aug 2014]

No todos los climatólogos están de acuerdo con que el papel principal se le asigne al océano Atlántico y le quede un papel secundario al océano Pacífico. Trenberth et al. publican en Nature Climate Change un estudio que reparte a partes iguales la causa del «hiato» térmico en la atmósfera de los últimos 15 años. Su análisis se basa en datos observacionales y en modelos climáticos de la llamada Oscilación Decenal del Pacífico (PDO por Pacific Decadal Oscillation).

La parte esta y la central el océano Pacífico se está enfriando y gracias a la recirculación atmosférica dicho enfriamiento está afectando a regiones alejadas en el globo (como la tendencia al calentamiento del Atlántico y los últimos inviernos fríos en Europa). [Kevin E. Trenberth et al., «Seasonal aspects of the recent pause in surface warming,» Nature Climate Change, AOP 17 Aug 2014]

El consenso científico es difícil de alcanzar en muchas ramas de la ciencia, pero en especial en las relacionadas con el cambio climático. Diferentes grupos de climatólogos interpretan los efectos observados en los datos experimentales de diferente forma y proponen diferentes causas en función de los modelos climáticos que usan. Sin embargo, a día de hoy, todos coinciden en que los océanos a escala global han estado calentándose durante el «hiato» térmico de la atmósfera. Nadie sabe cuánto tiempo podrán seguir acumulando calor. Pero el consenso apunta a que la temperatura global volverá a crecer, pues la Tierra sigue calentándose (de hecho, las emisiones de gases de efecto invernadero no han parado durante el «hiato»).

 

Gracias a Francisco R. Villatoro, El papel de los océanos en el cambio climático

 

3 Comentarios

Pedro J dic

24 agosto, 2014 a las 3:13 pm

Francis escribió: «La temperatura media del aire superficial en la Tierra ha estado creciendo desde 1975 hasta el 2000 y desde entonces se ha estabilizado»

Ni siquiera hay consenso en el hecho de que la temperatura no haya aumentado en los últimos 15 años. No es un periodo climatológicamente significativo (<~30 años), de tal manera que el ruido de las señales a corto plazo (ENSO, actividad volcánica, etc.) domina sobre la débil señal a largo plazo. Esa señal podría estar ahí enmascarada en el ruido.

Tienes una primera aproximación a la polémica en Skeptical Science

http://www.skepticalscience.com/has_the_rate_of_surface_warming_changed.html

http://skepticalscience.com/does-global-warming-pause-mean-what-you-think.html

http://www.skepticalscience.com/no-warming-in-16-years-advanced.htm

Ahí tienes un análisis de tendencias si se tiene en cuenta La Niña que hicieron Foster and Rahmstorf(2011) http://www.skepticalscience.com/foster-and-rahmstorf-measure-global-warming-signal.html

Uno de los autores, Grant Foster (alias Tamino) ha reivindicado en su blog que no se puede afirmar de una manera estadísticamente significativa que haya una pausa, al contrario, se puede decir que los datos son compatibles con la señal climatológica a largo plazo. Tienes sus argumentos en

http://web.archive.org/web/20080418070607/tamino.wordpress.com/2007/12/16/wiggles/

http://web.archive.org/web/20081029173848/http://tamino.wordpress.com/2008/09/12/dont-get-fooled-again/

http://web.archive.org/web/20100104074329/http://tamino.wordpress.com/2009/12/15/how-long/

http://tamino.wordpress.com/2012/07/06/how-long/

Gerardo dice:

26 agosto, 2014 a las 10:06 pm

Hace como un año leí en otro blog (del que no tengo nada que ver así que no es «autobombo»), un reportaje sobre una investigación que decía que buena parte del calentamiento global es debido a CFC y no al CO2:

http://neofronteras.com/?p=4120

¿No tendrá algo que ver este «enfriamiento» algo que ver con el CF como dice esta investigación?

Seria excelente una respuesta positiva, ya que los CFC están reduciéndose y «bajo control»

Plamen Todero Sótano dice:

27 agosto, 2014 a las 11:31 pm

Bueno, el CFC tiene su papel en el cambio climático, (persistencia en la atmósfera, destruye la capa de ozono), pero el principal culpable sigue siendo el CO2. Hace unos días, salió la noticia de que NASA encontró grandes sustancia y de tetracloruro de carbono.http://www.nasa.gov/press/2014/august/ozone-depleting-compound-persists-nasa-research-shows.El ciclo del Carbón juego el papel de un enorme termostato, cual regula la temperatura y la mantiene más o menos «constante», en un intervalo. Controla la cantidad de vapor del agua en la atmósfera(un 50% del vapor del agua, influye en el calentamiento y enfriamiento de la Tierra)y de allí su mayor efecto sobre el calentamiento global, a diferencia de los demás gases.http://earthobservatory.nasa.gov/Features/CarbonCycle/page1.php

 

Jardín de lluvia

 


Vista general del diseño complejo de jardines de lluvia

Diseño de un jardín de lluvia: la guía técnica

El cambio climático global es evidente y ya produce efectos visibles en el mundo. La Tierra se está recalentando, las lluvias extremas son cada vez más frecuentes y el nivel del mar crece, incrementando el riesgo de ondas de calor, inundaciones y otros desastres ligados al clima que a menudo tienen un impacto destructivo sobre nuestro ecosistema.

Oportunidades y estrategias para gestionar eficazmente estos riesgos ya existen o pueden ser desarrolladas a escala local o internacional, involucrando nuevas tecnologías sustentables.

Los jardines de lluvia son una solución ideal ante estas situaciones.

¿Qué es un jardín de lluvia?

En general, por jardín de lluvia entendemos una depresión (natural o artificial) que recolecta el agua superficial que fluye de los techos, carreteras, aceras y otras superficies urbanas impermeables o semipermeables después de eventos torrenciales de lluvia. Esta depresión, y las capas debajo de la superficie, permiten una evacuación parcial o total del agua en un sistema de drenaje subterráneo.

Con el término jardín de lluvia se indica también un tipo de proyecto con una capa «viva» que permite filtrar sustancias contaminantes, pesticidas, fertilizantes, etc., llevados por el flujo de las aguas, antes de entrar en los colectores.

Los proyectos más complejos de jardín de lluvia normalmente se indican como “bio-retención”: estanques, áreas verdes, jardines, etc.

El deflujo de las aguas de lluvia en las áreas urbanizadas es mucho más evidente que en los ambientes naturales, ya que los materiales semipermeables recogen agua y reducen la infiltración al mínimo.

La expansión urbana resta constantemente áreas al ambiente natural, quitándole eficacia al ciclo hídrico local. Es evidente que la urbanización es más veloz que la capacidad de adaptación del ambiente natural como el cambio climático es más veloz que la capacidad de adaptación del sistema de alcantarillado.

El deflujo de las aguas “limpia” las superficies urbanas transportando enormes cantidades de deshechos (llamado “contaminación de fuentes no puntuales”). Se estima que hasta el 70% de la contaminación en los ríos y lagos proviene de la lluvia que “lava” las zonas urbanas.

Precipitación y gestión de las aguas de lluvia

La gestión de las aguas de lluvia prevé el control del deflujo pluvial a través de crean proyectos, sistemas y un conjunto de acciones para reducir los riesgos provocados por el deflujo de las aguas de lluvia.

El primer paso necesario en la gestión de las aguas de lluvia es comprender el modo en cual el agua interactúa con el sistema examinado.

Un evento lluvioso se caracteriza por un breve pico inicial con un volumen de agua muy elevado. En el caso de que el volumen del agua supere la capacidad del sistema de alcantarillado, existe el riesgo de inundación.

Otra causa común de inundación es el mantenimiento inadecuado que puede crear una obstrucción (es decir bloqueos del flujo de agua debido a escombros), y consecuentemente la ineficiencia del sistema de evacuación del agua.

Un enfoque eficaz para la gestión de aguas pluviales debe considerar un análisis hidrográfico completo. Por ejemplo, es esencial anticipar los volúmenes involucrados en eventos lluviosos.

Las áreas urbanas se caracterizan por estructuras, edificios, calles y superficies que limitan la cantidad de agua descargada y filtrada por el terreno, determinando así un significativo aumento de los volúmenes de agua superficiales. Además, superficies como las calles resultan un recorrido preferencial en el cual el flujo aumenta rápidamente la velocidad y el potencial de devastación.

diferente indice de infiltracion vs escorrentia entre las superficies urbanas y naturales.

Diferente índice de infiltración vs escorrentía entre las superficies urbanas y naturales.

Respuesta del drenaje urbano a los cambios climáticos

Como mostrado durante la “11 ° Conferencia Internacional Urban Drainage Modelling”, la crisis climática podría tener un rol sustancial en los cambios del modelo de precipitaciones. Por ejemplo, fue previsto que habrá un aumento del número y de la intensidad de las “precipitaciones estivas extremas”.

Consecuentemente, se debe realizar una nueva evaluación de los riesgos, en particular por sus efectos sobre el sistema del agua potable y de aguas residuales.

En muchos lugares del mundo, el cálculo de ingeniería de drenaje hasta ahora se ha basado en las estadísticas para las cuales las lluvias serán las mismas en futuro, manteniendo las mismas tendencias del pasado y del presente.

Para considerar correctamente los cambios climáticos, los datos sobre las precipitaciones deben ser multiplicados por un factor que incluye un aumento previsto de la intensidad de la lluvia.

Sobre la base de estas hipótesis, un nuevo plan puede ser desarrollado teniendo en cuenta:

  • El diseño de nuevos sistemas de alcantarillado
  • El mantenimiento, la actualización y adaptación de los sistemas existentes.

Un tipo de solución como la del jardín de lluvia se inserta perfectamente en esta segunda (y más económica) categoría de trabajos.

posibles consecuencias de gestion inadecuada de aguas pluviales

Posibles consecuencias de gestión inadecuada de aguas pluviales

Diseño de un jardín de lluvia: dos soluciones diferentes

Con el fin de atenuar estos problemas, se pensaron diferentes soluciones; en este enfoque realizaremos un proyecto completamente funcional con dos opciones. Es oportuno tener presente que cada solución propuesta se debe adaptar a las condiciones locales, considerando factores climáticos, normativas locales, disponibilidad de materiales, etc.

Por lo que nos hemos propuesto, en este ejemplo supondremos que todos los tipos de investigaciones precedentes ya fueron conducidas y consideradas en las primeras fases de proyecto.

Ejemplo simplificado de diseño de jardín de lluvia

Ejemplo simplificado de diseño de jardín de lluvia

Diseño de jardín de lluvia simplificado

Un jardín de lluvia, simplemente, es un sistema diseñado para capturar el agua residual, re direccionando el flujo desde la superficie al subsuelo, activando algunas reacciones que tratan y purifican el agua.

La sencillez del diseño lo hace aplicable prácticamente en todos los lugares, incluso en los espacios privados, para capturar cantidades muy pequeñas de agua. Por ejemplo, puede encontrarse en los patios en dirección de salida del alcantarillado (ver imagen a continuación).

Diseño jardín de lluvia - planta

Diseño jardín de lluvia – planta

Como se puede observar, el agua de lluvia que proviene de las  cubiertas  se recolecta a través de un camino de guijarros hacia  el jardín de lluvia.

Para definir un criterio de dimensionamiento para un pequeño jardín de lluvia, necesitamos algunos datos de base, tales como:

  • el área de cubiertas
  • la cantidad de bajantes
  • la pendiente del terreno
  • el tipo de suelo
  • la cantidad de lluvia

En este ejemplo simulamos tener una cubierta de 200 m² con 4 bajantes: entonces cada bajante sirve una superficie de 50 m².

diseno de jardin de lluvia - secciones

Diseño de jardín de lluvia – secciones

Consideraremos entonces las siguientes líneas guía:

  • para pendientes pares o inferiores al 4%, el estanque debe medir aproximadamente 10 centímetros;
  • para pendientes entre el 5% y el 7%, el estanque debe medir aproximadamente 15 centímetros;
  • para pendientes entre el 8% y el 12%, el estanque debe medir aproximadamente 20 centímetros;
  • para pendientes superiores, resulta muy complejo utilizar este tipo de jardines de lluvia.

Supongamos que tenemos una pendiente del 6% y un estanque de 15 centímetros.

La calidad del suelo determinará la velocidad con la cual el agua será absorbida por el subsuelo: un terreno arenoso drenará el agua más rápido que un suelo limoso y un terreno arcilloso drenará el agua muy lentamente en comparación con las otras dos opciones.

En este caso consideraremos un suelo limoso.

Con respecto a la cantidad de agua, consideramos una medida de 5 centímetros de lluvia por evento.

Aquí tenemos la fórmula:

extensión jardín de lluvia = superficie cubierta x cantidad de lluvia / profundidad del jardín

50 m² * 0,05 m = volumen de agua = 2,5 m³
2,5 m³ / 0,15 = extensión jardín de lluvia = 16.7 m²

En base a estos datos, nuestro jardín de lluvia deberá ser de al menos 16.7 m².

El correspondiente proyecto BIM de jardín de lluvia está disponible para la descarga gratuita al final de este artículo. En el interior del archivo, se encontrarán también la tabla de volúmenes para el cálculo de las obras en tierra.

La imagen a continuación muestra un proyecto de jardín de lluvia a baja escala en un contexto más urbanizado. A falta de espacio disponible, este sistema de recolección puede resultar muy útil.

solucion facil de jardin de lluvia en area urbanizada

Solución fácil de jardín de lluvia en área urbanizada

Diseño complejo de jardín de lluvia

En un contexto altamente urbanizado, puede parecer difícil aplicar estos conceptos, ya que mayores volúmenes de agua involucrados pueden requerir una superficie mayor para el estanque; este obstáculo puede ser superado solo aumentando la capacidad de drenaje de las capas debajo del estanque mismo.

El objetivo de este enfoque es brindar una guía de consejos útiles para el diseño de jardines de lluvia; por tal motivo trasladaremos todos los aspectos de cálculo, las normas y los reglamentos relativos (considerándolos a nivel local).

Sin embargo, supongamos que la superficie del jardín sea de casi el 2% del área urbana impermeable, un estanque debería tener 10-30 cm de profundidad y una conductividad hídrica de 100-300 mm/hora.

Veamos algunas características de diseño.

jardin de lluvia, diseno complejo: seccion transversal con medidas y estratigrafia vertical

Jardín de lluvia, diseño complejo: sección transversal con medidas y estratigrafía vertical

En este ejemplo de jardín de lluvia iniciaremos diseñando una sección de excavación de 2,75 m x 1,40 m (excluidos los volúmenes ocupados por elementos estructurales), con un revestimiento impermeable tanto sobre los lados como sobre el fondo.

Debemos capturar el agua de lluvia residual que llega desde la calle por un lado y desde el carril bici y la acera por el lado opuesto.

El flujo de agua se insertará en el jardín a través de los foros de descarga que representan también los límites más altos que el agua puede alcanzar antes que el sistema de “demasiado lleno” empiece a funcionar.

Recordemos que el “demasiado lleno” drenará el agua sin ningún tratamiento.

Otro componente útil puede ser construir una pequeña trinchera de mantenimiento debajo de los agujeros de evacuación. Este pre-tratamiento interceptará y mantendrá los sedimentos que podrían obstruir el filtro, acortando su duración y comprometiendo las prestaciones.

El primer nivel técnico que el agua encontrará es el área filtro. Es aquí que la presencia de vegetación resulta importante.

Este nivel debería seleccionarse considerando las propiedades estructurales de los materiales y la conductividad hidráulica, generalmente entre 100 y 300 mm / hora.

La finalidad principal es permitir el drenaje del agua y por ende contener menos del 3% de limo y arcilla (los materiales son tratados mediante lavajes que remueven la arcilla y fracciones de limo).

Claramente es oportuno crear un sustrato para mantener la expansión de las raíces de las plantas, y también para promover un rico ambiente microbiológico.

Considerando el sistema de raíces de la variedad de plantas elegidas, el espesor de esta capa no debe ser superior a 40 y 60 cm.

Apenas bajo la capa de filtro, se debe implementar también una capa de transición. Esta área finge de filtro para impedir la migración vertical de los materiales que componen el biofiltro en la zona de drenaje. Esta área debe estar compuesta por arena bien calibrada con menos del 2% de partículas finas.

Con el fin de agilizar el drenaje, cada capa inferior debe tener mayor conductividad hidráulica respecto a aquellas superiores. El espesor mínimo de esta capa debería ser de 10 cm.

La capa al fondo de la estratificación es el sistema de drenaje, constituido por agregados finos (tamaño de grava de 2 a 7 mm). La función principal de esta zona es recoger y transportar el agua de lluvia tratada y, por último, en este particular diseño en capas, mantener y almacenar una reserva de agua accesible a la vegetación durante los períodos de sequía.

El espesor de esta zona (temporalmente) sumergida debería ser de entre 45 y 50 cm (se requiere un mínimo de 30 cm). Largos períodos sin lluvias tendrán un impacto negativo en la vegetación. Por este motivo, es fundamental estimar el período operativo de la zona sumergida y poder considerar esta simple fórmula:

tiempo de descarga del agua (días) = porosidad del medio x profundidad zona sumergida (mm) / tasa de evapotranspiración (mm / días)

La conductividad hidráulica del sistema es superior a la zona de transición superpuesta: en esta zona puede instalarse también un tubo de recolección como parte de la toma elevada.

Otro componente y muy recomendado en este sistema es la “descarga elevada” que permite crear una fuente sumergida para filtrar y recoger el agua en exceso.

algunas de las reacciones fisicas y quimicas alrededor de la planta y sus raices

Algunas de las reacciones físicas y químicas alrededor de la planta y sus raíces.

Diseño de un jardín de lluvia: vegetación

Como dijimos, las plantas son elementos esenciales en los sistemas de bioretención.

Es difícil definir una variedad de vegetación que puede ser plantada en todas las condiciones climáticas en todo el mundo; por tal motivo en este ejemplo evidenciaremos algunos principios básicos a tener en cuenta para seleccionar la vegetación.

La regla principal: es necesario plantar variedades y especies locales.

Las plantas autóctonas son fundamentalmente en sintonía con el ambiente; por ende, reaccionaran mejor a los cambios climáticos, a los ataques de parásitos y a la presencia de hierbas infectantes. En pocas palabras, son más resistentes.

Otro aspecto fundamental a tener en cuenta son las características de las raíces. Las mejores prestaciones son directamente proporcionales al ancho de las raíces, pero también a la alta presencia de raíces sutiles y a una superficie de contacto general entre raíces y suelo.

Por otra parte, una buena práctica consiste en utilizar una alta densidad de implantes combinados con una gran diversidad de especies. Diferentes plantas pueden variar en sus prestaciones en relación a los cambios del tiempo durante el cambio de estación. También la capacidad de sustraer sustancias nutritivas, minerales y metales, puede variar considerablemente entre las diferentes plantas.

Estas son solo algunas de las consideraciones más importantes a realizar. Un estudio separado y localizado del componente vegetal es fundamental para un mejor rendimiento del sistema.

En conclusión, hemos descripto algunos modelos de jardín de lluvia. Existen aún más variantes posibles en términos de forma, tamaño y complejidad.

Por ejemplo, en la siguiente imagen es posible ver un jardín de lluvia a gran escala que es mucho más eficiente que el modelo desarrollado anteriormente, con algunas funciones utilizadas también en el modelo complejo (el proyecto completo se puede descargar gratuitamente a continuación).

seccion de un diseno complejo de jardin de lluvia

sección de un diseño complejo de jardín de lluvia

Gracias: https://biblus.accasoftware.com/es/diseno-de-un-jardin-de-lluvia/